La mexicana Raquel Reyes fue seleccionada junto con su equipo para asistir a un programa aeroespacial en las instalaciones del Space Rocket Center de la NASA.
El equipo seleccionado por la empresa privada AEXA, está conformado por estudiantes del Tec de Monterrey del campus de Monterrey, Querétaro, Estado de México, Sonora Norte y Puebla, así como por universidades del país.
“INTERNATIONAL AIR AND SPACE PROGRAM DE AEXA”, CURSO DE CINCO DÍAS
AEXA tiene la función de gestionar el programa aeroespacial en conjunto con la NASA, por lo que todo el equipo viajó a Huntsville, Alabama, del 14 al 20 de noviembre para participar en un curso intensivo de ingeniería espacial donde resolvían problemas reales de la NASA.
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El proyecto del equipo titulado “Úurich” (caracol en maya), fue seleccionado como uno de los tres ganadores, donde únicamente dos serán lanzados al espacio en este 2022. El dispositivo se enviará a la Estación Espacial Internacional (EEI) y servirá como herramienta de exploración.
“Nuestro mecanismo, no necesita una estimulación eléctrica o mecánica, sino una estimulación térmica. Con la temperatura ejecuta todo el movimiento, en este caso es un movimiento circular”, comentó.
Resultó ganadora en la categoría de “Mejor mecanismo” gracias a su planteamiento sencillo y adecuado, “consiste en un mecanismo compliant con el material adecuado para soportar las condiciones lunares, contemplando factores de polvo, temperatura y radiación”.
VIVEN LA EXPERIENCIA DE LOS ASTRONAUTAS
Raquel, estudiante de Ingeniería en Innovación y Desarrollo del Tec campus Querétaro, comentó que el programa se enfocó en enseñar ingeniería aeroespacial, “además de plantear el entendimiento de cómo entrenan los astronautas. Fue una experiencia totalmente vivencial”.
Los estudiantes conocieron el preentrenamiento y pruebas físicas que viven los astronautas antes de partir al espacio, “es un sueño poder trabajar en un proyecto que irá a la Estación Espacial Internacional (ISS), así que ahora estoy más puesta que nunca a seguir compartiendo experiencias increíbles y seguir soñando con la siguiente meta”.
CONTINUARÁ BUSCANDO COLABORACIONES CON LA NASA
Además, seguirá trabajando en su proyecto, “tenemos planeado seguir desarrollando el prototipo del mecanismo. De ser mandado al espacio, serán seis meses los que esté allá”.
Narra que desde enero supo que tendría la oportunidad de asistir al programa, “y en este proceso de casi 11 meses trabajé, aprendí, me divertí y sobre todo soñé muchísimo”.
El equipo buscará seguir en contacto con la NASA y ampliar su portafolio profesional, pero Raquel menciona, “muchas veces queremos trabajar en la NASA por todo lo que implica, pero a mí me gustaría trabajar en la Agencia Aeroespacial Mexicana”.
