¿Te imaginas qué se siente caminar por el espacio? Las caminatas intergalácticas llaman mucho la atención porque implican “caminar sobre el espacio”, caminar por un “lugar” que contiene toda la materia y la energía existente en la realidad. Para prepararse para la experiencia los astronautas de la NASA practican en una enorme alberca de 12 metros de profundidad.
De acuerdo al programa “Houston we have a podcast” de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de los EU, el programa “Moonwalk (Caminata lunar)” incluye entrenamiento en una alberca de 31 metros de ancho, 61 metros de largo, 12 metros de profundidad y contiene cerca de seis millones de galones de agua.
¿Caminar por el espacio es como caminar bajo el agua?
La respuesta es técnicamente no, pero es un tanto similar. James Shaw, ingeniero y director de proyectos en el Laboratorio de Flotabilidad Neutral de la NASA (NBL, por sus siglas originales) indica que al tratar de simular las condiciones ambientales del espacio en la tierra, lo más parecido a una caminata estelar es una caminata “bajo el mar”.
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Además, las dimensiones de la alberca de entrenamiento también permiten simular en ella maniobras “de aterrizaje, recuperación, salida y sobrevivencia en el agua”.
“Trabajamos en un ambiente sumamente hostil”
Al ser cuestionado sobre la importancia de este tipo de entrenamiento en los astronautas, Shaw respondió: “queremos que el astronauta esté sumergido en su entrenamiento tanto física como mentalmente”.
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Declaró también que se mantienen fuertes niveles de seguridad ya que, en sus palabras, “No se nos escapa que operamos en una instalación que es peligrosa para la vida. Entonces, todos nuestros procedimientos y operaciones diarias definitivamente se adaptan al hecho de que trabajamos en un ambiente altamente hostil”.
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Cuando la alberca del NBL pretende ser el espacio exterior, el agua se mantiene en calma y los astronautas son suspendidos a través de poleas de peso en dos dimensiones dentro del agua, para simular una caminata espacial. Cuando se pretende que la alberca recree las condiciones de mar abierto, entonces aparece la lluvia, el viento y las olas simuladas por un complejo equipo de ingeniería.