Reconocida no solamente en el ámbito de la pesca deportiva sino también como una atleta consumada, disciplinas en las que ha conquistado numerosos galardones, Rosa Edith Morales, “Rosita Pescadora”, como cariñosamentese se le conoce y reconoce, ante la pandemia por el “coronavirus” COVID-19, afirma: “Yo me quedo en casa”.
Con una importante trayectoria en el deporte que le ha llevado a trascender en el ámbito estatal y nacional, describe a El Sol de Tampico sus días en tiempos del Covid-19, aprovechando para realizar actividades en casa, meditar, pero sobre todo orar a Dios para que pase esta alerta sanitaria y, con el entusiasmo que le caracteriza, volver a la práctica de la pesca deportiva, que tantas satisfacciones le ha brindado.
“Definitivamente, esta pandemia vino a mover el planeta, sensibilizarnos pero también concienciarnos y sobre todo valorar y amar cada detalle y momento de nuestra vida, desde estar más al pendiente de la familia, de los vecinos de uno mismo e inclusive del resto del mundo”, expresa Rosa Edith.
Se sincera. “Si algún día cometimos un pecado, siento que ya lo estamos pagando. Hoy me arrepiento de no correr frente al mar o de no meterme a él y jugar un poco mientras espero la captura, de no mirar el cielo durante mis noches de pesca, de no visitar y saludar a mis compañeros pescadores que se ubicaron junto a mí en los torneos o simplemente no tomarme un minuto para compartir con ellos una foto durante esa larga fila para registrar nuestra participación en esa esperada competencia deportiva”. Añade Rosita Pescadora que “hoy me di cuenta de que tengo más anzuelos y carretes que pares de aretes, mis gorras son demasiadas y no creo que todas sean necesarias, ya las lavé y las coloqué en una bolsa, seré compartida con mis compañeros”.
“Me percate que soy muy querida en las redes sociales pues todos los días recibo mensajes cuestionándome como me encuentro o dándome un lindo saludo y de igual manera ya me relaciono más con los pescadores de todo el mundo”, explica.
Lamentablemente, en estos días sufrió un percance pero no por ello pierde su espíritu optimista. “Hace unos días mientras subía a una escalera y poder colocar en la pared unos cuadros con mis publicaciones del periódico El Sol de Tampico, sufrí una caída y me volví a fracturar dos dedos de mi pie. Me conozco muy bien y si no hubiese sido por esto, ahorita anduviera buscando como colarme en la playa y poder disfrutar un rato de pesca, me es muy difícil mantenerme en casa, en completo encierro, pero hice conciencia, si con esto contribuyo a que mi hermoso mundo mejore yo con todo mi corazón lo hago”, señala.
“Si con esto”, afirma la destacada deportista, “estoy asegurando mi bienestar y el de mi familia, yo me quedo en casa, tengo mucha fe, todos los días pido a Dios y a la virgencita de Guadalupe que esto pronto concluya. No pierdo la esperanza en que algún día volveremos a estar juntos mis amigos pescadores y yo y mientras, seguiré disfrutando de este hermoso balcón en mi cuarto y que literal, no lo conocía tan bien”.
NO OLVIDA LA PESCA DEPORTIVA
“En estos días de encierro le doy mantenimiento a mis carretes y acomodo y limpio los anzuelos en su caja, veo videos de pesca y atiendo a mis compañeros de las redes sociales intercambiando tips y experiencias. Elaboró los reinales que utilizaré en los futuros torneos”.
Pero también, “continúo realizando videos para concientizar a las mujeres en la detección en su etapa inicial del cáncer de mama. Estoy alerta ante toda esta contingencia del Covid 19 y sobre todo estoy al pendiente de las necesidades y estado de salud de mi mamá ya que vívimos juntas”.
Inquieta, que esa es la naturaleza de toda deportista, Rosa Edith Morales está consciente de que ahora es momento de seguir las indicaciones de las autoridades sanitarias, resguardarse en el hogar, mesanje que le envía a la población del sur de Tamaulipas, predicando con el ejemplo y reiterando: “Yo me quedo en casa”.