Cuando se menciona el deporte de la lucha libre se vienen muchos gladiadores a la mente, pero a finales de los años 80, sobre todo en la década siguiente hubo un luchador que marcó una época por su estilo artemarcialista, su nombre Octagón, que sin duda rápidamente se posicionó en el gusto del público haciendo mancuerna con Atlantis y Máscara Sagrada en la Empresa Mexicana de Lucha Libre.
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¿Cómo llegó al arte del pancracio? Octagón primeramente jugó al futbol, se probó con las Águilas del América en 1977, logrando debutar en la primera división jugando a lado de Enrique Borja, Carlos Reinoso, Prudencio “Pajarito” Cortés, entre otros, sin embargo señaló que no era lo que esperaba y regresó a su entidad natal, Veracruz, asentándose en la capital, Xalapa; posteriormente reculó a la Ciudad México y trabajó en Petróleos Mexicanos y fue ahí cuando recibió la invitación por parte de Radamés Coccó “Masakre”, quien al saber que la hoy superestrella era cinta negra en artes marciales, fue ahí cuando llegó a la Arena Apatlaco con Raúl Reyes con quien entrenó 3 años previó a su debut.
En palabras del “Amo de los Ocho Ángulos”, señaló que al arribar a esta disciplina, “era otro rollo, quedé fascinado con la lucha libre y agradecido con la oportunidad que tuve al debutar el 30 de abril de 1982 con el nombre de Dragón Dorado en la Arena Azteca, después luché 7 años con el nombre de Amenaza Elegante y ya 31 años como Octagón”.
Luego de picar piedra por pequeños recintos donde se observaba el arte del pancracio, su gran salto fue en 1989, arribando a la Empresa Mexicana de Lucha Libre, aseverando que era un novato y con apenas un año dentro de la organización el 14 de diciembre de 1990, apostó su máscara en un triangular frente a Fuerza Guerrera y Huracán Ramírez, logrando destapar a este último; “Yo creo que ese triunfo fue un trampolín para Octagón, para seguir escalando a cosas importantes en la lucha libre mexicana”, aseveró el gladiador.
Tras describir años muy bonitos en el hoy Consejo Mundial de Lucha Libre, el otrora jugador del América fundó junto con Antonio Peña Herrada y Konnan la empresa AAA en 1992, que más allá de los problemas legales por el nombre, señaló que fue un tiempo muy bueno y el trato siempre fue bueno hasta la muerte del creador, pues la relación con sus colegas fue extraordinaria, además del cariño de la gente que siempre se lo demostraron, ciudad tras ciudad donde se presentaba la caravana tres veces estelar.
Al cuestionarle qué recuerdos tiene de la afición de la zona sur de Tamaulipas respondió, “Ese público del Centro de Convenciones siempre me ha apoyado y muy contento que siempre que voy allá me reciben muy bien”.
Octagón también recordó cuando apostó la máscara con Jaque Mate en un duelo en superlibre en el recinto petrolero, en la batalla las “second” eran sus actuales esposas y explicó: “En esa lucha nos dimos hasta con la cubeta, teníamos que estarnos cuidando y cuidando a las esposas, tuvimos que echarle toda la candela para poder salir adelante y afortunadamente esa máscara también está en mi vitrina”.
Actualmente el veracruzano se encuentra en el ámbito independiente, cuenta con una promotora de Lucha Libre y Box, además de ser presidente de una Asociación Nacional de Luchadores Profesionales desde 2017.