Con la finalidad de promover el skateboarding en la zona se realizó en las canchas gemelas de Echeverría un concurso entre la comunidad de patinadores donde Luis Fernando Pérez Padilla se llevó el trofeo al primer lugar.
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En este evento, que además contó con un torneo de freestyle y de grafitti, congregó a un aproximado de 100 artistas y deportistas de la zona, todos repartidos entre las canchas y el parque que se encuentra en la mencionada colonia, quienes buscan el reconocimiento de la población y contar con los espacios adecuados para la realización de sus actividades.
En skateboarding se dispuso un circuito de skate que fue hecho por los mismos patinadores para realizar rutinas elaboradas y seguirse preparando para desafíos nacionales.
Al igual que en los pasados eventos, la modalidad fue intermedios y avanzados, dándoles minuto y medio para realizar sus rutinas. Cada participante realizó diversos trucos sobre los circuitos dispuestos, mientras eran calificados por los jueces Carlos Acevedo, Leonardo Daniel y Francisco Ortiz.
Terminando la primera ronda se prosiguió a la eliminatoria para definir los tres primeros lugares de cada categoría. En el área de intermedios el primer lugar fue para Ángel David Estrada "Grotezko" de tan solo 16 años de edad, seguido de los jóvenes Miguel Ángel y Martín Zamora, hermanos que comparten el amor por el skate y ambos talentosos ganando el segundo y tercer lugar, respectivamente.
En el área de avanzados la presea fue para Luis Fernando Padilla seguido de Maximiliano Castillo y Adal Díaz, quienes a pesar de llevar corto tiempo practicando el deporte ya se alzan como los mejores en la zona. Se realizó además la categoría "Truco bajado, truco pagado", donde todos los competidores tenían que realizar sus mejores trucos sobre cajón y tubo y aquel que lo lograra se llevaba dinero en efectivo.
Los jóvenes ganadores se llevaron como premios tablas y productos diversos de skate, además del reconocimiento de sus compañeros que en todo momento vitoreaban cada hazaña que realizaban, así como intervenían con los jueces por otra oportunidad cuando algún truco no se bajaba, demostrando así el compañerismo que prevalece entre los practicantes de la zona.