Una de las disciplinas que poco a poco ha ido ganando terreno en el terreno de las artes marciales, es el muay thai, que en la zona sur del estado ha incrementado la práctica, además de que los practicantes a este deporte han llegado a participar fuera de la localidad, es decir, a nivel nacional e internacional, logrando resultados positivos. Platicamos con el maestro Enrique Maturano acerca de esta actividad, así como de su trayectoria.
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Enrique Maturano nació en la Ciudad de México, pero gracias a este deporte, conoció a su hoy esposa y adoptó a Ciudad Madero, Tamaulipas como su nuevo hogar con apenas 24 años de edad, reconocido internacionalmente como un profesor de alto nivel, también tiene un pasado como combatiente, sin embargo, su primer deporte de contacto no fue el muay thai, sino el taekwondo.
"Empecé desde muy niño, a los 6, mis papás me metieron ahí porque era muy latoso, era hiperactivo, y necesitaba descargar mi energía, estuve alrededor de 4 años, llegué a la cinta verde avanzada, en la secundaria tras un incidente, mi papá me llevó a los 12 años al box con Carlos Zárate y ahí durante 4 años pude convivir con Juan Manuel Márquez, Edgar Sosa, entre otros y participar en Guantes de Gloria".
Tras su paso por el deporte de las orejas de coliflor, lamentablemente nos comparte que no pudo acceder a la universidad que él deseaba y se puso a trabajar en un cine, pero al necesitar el deporte, un día llegó al "Parque de los Coyotes", donde conoció a un maestro que enseñaba kickboxing y muay thai, en el cual su proceso también fue de 4 años.
"Desde muy chico siempre me ha gustado competir, lo que entrenaba, siempre quise ir a los torneos, con el muay thai participó en un nacional donde fui campeón, estuve en peleas locales y debuté como profesional en ambos deportes, en amateur no perdí nunca y en profesional tengo 8 peleas, 5 ganadas y 3 perdidas.", comentó el sensei.
En el torneo nacional que fue en la capital azteca, nos compartió que ahí conoció a la madre de sus hijos, y en son de broma, señala "me fue a robar a México", ella fue peleadora, coincidiendo que también ganó dicha competencia, tras su llegada a la urbe petrolera, comenzó a laborar en unas plataformas en el norte de Veracruz, tras ya no haber trabajo, le ofrecen dar clases de estas disciplinas, aceptando y empezando hacerse de un nombre en la zona sur de Tamaulipas.
Con el paso de los meses, la gente lo comenzó a buscar para entrar a su academia, cambiándose de lugar tras el aumento de alumnos, hasta donde el día de hoy está establecido, cerca del ITCM, en donde forma a peleadores y en sus filas cuenta con peleadores ya profesionales, cabe destacar que fue contemplado por las fuerzas armadas mexicanas para capacitar a los elementos.
"Te soy sincero, vivo de esto, no le pido nada a otros trabajos, hago lo que me gusta lo que me apasiona, con esto le doy de comer a mis hijos, y con el andar de los años, le he dado la oportunidad de mis alumnos de ir a competencias nacionales e internacionales, la escuela es muy chica, pero el nivel lo tenemos a nivel internacional", aseveró Maturano.
El maestro compartió para el periódico que no solo es formar peleadores, sino personas, ya que es parte del arte marcial, además de considerar que en la actualidad se han perdido valores y por medio de los deportes se pueden rescatar a niños y jóvenes de andar en situaciones negativas; por otra parte el profesor nos comentó que sus competidores de alto rendimiento continúan con la preparación de cara a eventos en puerta, incluyendo uno el próximo mes de mayo, aquí en la zona metropolitana.
"Siempre les digo a mis alumnos, si aquí puedes salir adelante, allá afuera también, eso es lo que me ha dejado este deporte y se lo transmito a ellos, hay chicos que se acercan y me dicen que no tienen para pagar, y no se les cobra, prefiero que estén aquí haciendo ejercicio, que anden afuera haciendo cosas malas", sentenció el maestro Enrique Maturano.
