Guillermo Hernández Canto es otro de los árbitros amateur de importante trayectoria, conocido en la mayoría de los campos de futbol de la zona sur de Tamaulipas, y quien desde muy joven heredó el gusto por la labor de silbante de su padre, Camilo Hernández Chávez, quien fuera presidente del Colegio de Madero.
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"Me inicié en el arbitraje a la edad de 14 años en 1984, al fallecer mi papá, quien fue presidente del Colegio de Madero durante mucho tiempo, Camilo Hernández Chávez (QEPD), y sus compañeros nos iniciaron a mí y a mi hermano en esto, nos llegó a la sangre, y yo a lo largo de todos estos años no lo he dejado más que por lapsos", rememora Hernández Canto.
Así, recuerda que en los años de 1984 y 1985 tiene intensa participación en el Área Menor de la Liga Petrolera, pero por una operación tuvo que retirarse. "La verdad es que no tenía conocimiento de nada, ya después fui haciéndome de conocimientos con el tiempo, le empecé a agarrar sabor, antes se sufría mucho en el arbitraje, había mucha competencia".
Para 1987 es invitado a participar en la entonces Liga Industrial, con Efrén Gutiérrez Alcocer. "Ahí estuve hasta los 22 años y sancioné mi primera final en la categoría Intermedia en 1988; en esa final los delegados me proponen como el árbitro joven más destacado del torneo. Más adelante me integré al Colegio de la UAT con el profesor Pepe Ontiveros".
Deja nuevamente la labor arbitral para ingresar en 1996 a las filas del Ejército Mexicano, y tras quedar desligado de la institución castrense en el 2001, "me incorporo al Colegio de Árbitros de Tampico de Paco Alexander. Fueron 8 o 9 años en lo que considero fueron mis mejores momentos en el arbitraje, pues le dábamos servicio a los mejores torneos, la Liga Petrolera, la Premier, Interbancario, en Pueblo Viejo, pero sobre todo destacaba en ese tiempo fue la Liga Regional de las Huastecas. Fueron varias finales en las que estuve presente recibiendo el reconocimiento de los delegados de los equipos por tres torneos en la Regional en la que 'pité' dos finales seguidas, una de ellas en Matlapa y la otra en Valles".
"Posterior a eso me desligo del Colegio de Tampico por cuestiones de carácter netamente personal y me vuelvo árbitro independiente; ya decido trabajar por mi cuenta y donde mejor me acomodaba y así he estado muchos años, aparte me dediqué mucho a organizar torneos de futbol, en la Divisoria, en Los Encinos, Cancha Max, estoy ayudando en el torneo empresarial en la UVM".
"También hubo una etapa en la Liga ADIENMSST, en la ODEIP arbitrando finales de las categorías de preparatoria y universidad. A una final de la que me acuerdo mucho fui invitado por Toño Balderas, fue una eliminatoria regional Intertecs en el Tec de Madero, me invitó a colaborar y fui con mucho gusto, ahí los coordinadores decidieron que fuera a dirigir la final. Ganó finalmente Victoria, en tanda de penales y los organizadores estuvieron satisfechos con mi labor".
A sus 50 años y pese a que por momentos tuvo que dejar el arbitraje, afirma que "nunca me deslindé ni me voy a deslindar del futbol, he estado activo y siempre ahí en los mejores torneos, he arbitrado finales en la Morelos, en la Anáhuac, en la Luis Donaldo Colosio. Al final, también es una fuente de trabajo y hay que hacerlo bien, hay que ser educado y realizar tu labor lo mejor posible".
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