Estadio Municipal, Atletas Campesinos enfrenta al Tampico Futbol Club buscando zanjar a quién debe pertenecer el farol rojo del grupo IV. Los queretanos con 3 puntos, los jaibos con 5, en la jornada 11, están al ras del infierno.
4 de enero de 1981, Tampico estrena técnico, Gustavo “Halcón” Peña. Arranca el segundo tiempo, empatado sin goles. Minuto 78, Revetria es derribado a las afueras del área grande, para que el árbitro marque falta cargada al lado izquierdo del ataque celeste. Un hombre se sitúa con seriedad frente a la pelota, tanto ofensores como defensores reclaman la distancia de la barrera. Galindo “madruga”, disparando a media altura, con efecto para que el balón entre al lado izquierdo de Gassire, pegado al poste.
Dos jóvenes visitan el hotel donde se hospeda “El Gallo” Jáuregui, nuevo timonel “Celeste”. - Mientras que Luis Plascencia conversaba con Jáuregui, quien cuestionaba entre bromas que si ya andaba de promotor - recuerdaBenjamín Galindo -; Luis respondía que contaba con magníficas condiciones, que dejara que entrenara para que observara mi juego. Cerca de cumplir los 18 años comencé los entrenamientos, hasta que dos semanasdespués “El Gallo” anunciara que entraba en los planes para el torneo 79-80.
¿Cómo fue su debut?
El debut de Galindo Marentes fue en la grama del Tamaulipas el 18 de agosto del 79, en el cuadrangular “Jaiba Brava”, aprovechando que a falta de un lateral izquierdo, “El Gallo” Jáuregui preguntara quién podía jugar esa posición. Galindo, deseando mostrarse a la fanaticada, levantaría la mano para salir a competir contra el Atlas. La presentación oficial sería en la jornada 1, el 23 de septiembre del 79, en el mismo coloso de la Unidad Nacional, en un empate a ceros con el Atlante, donde Galindo, al minuto 67, aparecería de relevo por Alejandro Ojeda, jugando en su posición natural, el medio campo.
Para Galindo su sueño siempre fue jugar al futbol, en la posición de medio creativo, ya que gustaba de poseer la pelota, jugar libre al ataque, con posibilidad de moverse, manteniendo contacto importante con la pelota. Su obsesión nunca fue el anotar, ya que privilegiaba el pase a profundidad, para que el delantero tuviera ventaja ante los defensas.
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Los Campesinos persiguen el empate, solo que Vázquez del Mercado está acertado en sus intervenciones. Esquivel y Salazar cortan todo peligro, al tiempo que Narciso y Ojeda maniatan el mediocampo, mientras Galindo distribuye pelota a Lira y a Revetria, que no dejan que los laterales enemigos avancen. De aquel Tampico Galindo Marentesrelata el encuentro con uno de sus ídolos: - De “El Tano” Bertocchi aprendí bastante, era un jugador extraordinario que aparte de su inmejorable técnica de golpeo, brindaba magníficos consejos, sugiriéndome que no desesperara, que llegaría mi oportunidad, porque a veces no jugaba, que cuando la obtuviera la aprovechara al máximo.
De aquella Jaiba Brava de finales de los 70, donde reinaba un calor fortísimo obligando a que las escuadras que visitaban el Tamaulipas terminaran bañándose en el entretiempo para cambiarse de playera, Tampico sacaba ventaja; de esos factores Benjamín Galindoseñala: -Las gradas del estadio estaban pegadas a las líneas de banda. En una ocasión, mi padre que asistió a verme jugar, me regañó al concluir el juego, diciéndome que cómo era posible que no escuchara su grito al pasar la banda, terminé diciéndole que no lo escuché porque estaba concentrado en el juego.
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“Los zurdos engañan, son engañadores, buenos golpeadores de pelota, tienen la ventaja de la sorpresa”, expresaba el legendario comentarista Ángel Fernández y precisamente Galindo heredó de su padre, quien en el beisbol bateaba de derecha e izquierda, la cualidad de pegarle al esférico con ambas piernas. Virtud que después de los entrenamientos ejercitaba, quedándose a practicar tiros libres, primero con Miroslav Draganic, en “Los Jaibos”, ya después en el Tampico-Madero con el auxiliar de Carlos Miloc, Héctor E. Eugui, que era zurdo, quedándose para patear con la zurda. Ejercicio que realizó toda la vida de futbolista profesional en todos los equipos que militó.
Minuto 89. Los queretanos al abordaje tratan de conseguir el empate; sin embargo, descuidan su parte baja, situación que aprovecha Galindo para filtrar pase a Lira, que a velocidad por la banda izquierda deja sembrado a Campos, que queda en el suelo; penetra el área y frente a la salida de Gassire, dispara raso, colocado, para asegurar la victoria jaiba. - El mejor centro delantero con el que jugué – sentencia Galindo Marentes – fue Sergio Lira, quien contaba con grandes condiciones, habilidoso, rápido, de buen salto, un atacante completo.
La Jaiba Brava, de Paulino Lomas, tuvo una estancia corta de cinco años dentro del futbol mexicano. - En su último torneo se descendió, ya no pudimos salir de esa realidad que no le deseo a nadie -enfatiza Galindo -, fue tormentoso sobre todo cuando se definió en un tercer partido contra el Atlas, los directivos comentaronque tendríamos que jugar en Segunda División. Al final pudimos contratarnos con el recién formado Tampico-Madero, para el certamen 82-83. El descenso fue doloroso, fue de aprendizaje, permitiéndome analizar dentro del futbol los porqués, cuando se gana o se pierde.
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El astro Neymar expresó:“El secreto es creer en los sueños, en tu potencial que puede ser como tu estrella; sigue buscando, sigue creyendo y no pierdas la fe en ti mismo”. Benjamín Galindo, persiguiendo un sueño, primero debutó, después se mantuvo, más adelante cerró un ciclo con el Tampico Futbol Club, convirtiéndose en uno de sus mejores centrocampistas.
Actualmente, Benjamín Galindo Marentes imparte charlas de testimonio de vida, así como clínicas de futbol. Radica en Guadalajara.
Benjamín Galindo, exfutbolista profesional
"Durante los 7 años que jugué en el puerto, la fanaticada siempre me arropó de una manera increíble, lo que más disfrutaba era salir a la cancha un domingo por la tarde, bajo un sol quemante, para responderle a la gente, eso significaba lo más hermoso para mí".