Temporada 79-80. El horizonte límpido, sin ninguna nube que anuncie mal tiempo, sólo el azul galáctico en el firmamento. Los jaibos estrenan nuevo timonel, Ignacio “El Gallo” Jáuregui, y se cristaliza las contrataciones de Hebert Carlos Revetria, “Paco” Castrejón, Román Nájera y un novel Benjamín Galindo. Emerge en la nave jaiba el departamento de Relaciones Públicas, dirigido por Antonio Lomas, tambores de guerra repiquetean fuertemente en el Coloso de la Unidad Nacional.
-Convertirme en directivo del Tampico fue hermoso –rememora Antonio Lomas- porque el futbol es una pasión, viviéndola primero de jugador en el Tampico viejo, y después, repitiendo la experiencia de directivo con el Tampico FC.
Acerca de la relación con el técnico “Nacho” Jáuregui, Lomas explica: - Empezó a brindarme consejos de cómo contratar jugadores; en una oportunidad me dijo que había visto a un zurdito, que le pegaba con las dos piernas, que jugaba con un equipo amateur, “Los Santos”, en Guadalajara. Posteriormente sabría que se trataba de Benjamín Galindo. La carta costaría al Club 250 mil pesos, buen dinero en ese tiempo.
TORNEO 80-81
Tampico FC reuniría a dos de sus jugadores más talentosos sobre la media cacha: Miroslav Draganic y Benjamín Galindo. -Miroslav ayudó a Galindo a perfeccionar los tiros de larga distancia - puntualiza Lomas Delgado –. Ambos se quedaban después de la práctica general para ejercitar el golpeo del balón; dicha enseñanza del yugoslavo fructificó, pues Galindo se convirtió en un maestro de los cobros desde fuera del área, así como de los penales.
1962; ESTADIO TAMPICO
Los jaiberos del Club Deportivo Tampico, cuentan con problemas para conformar el cuadro de reservas. -Tampico jugaba los sábados por la noche - recuerda Antonio Lomas -, Nicolás Palma definía los miércoles quiénes jugarían el fin de semana, sólo que esa ocasión había faltado el guardameta, aunque era delantero, tuve que calzarme los guantes. En aquella época en la defensa suplente jugaba “El Puyín” Guzmán que había venido del Higo, Veracruz (más tarde se enrolaría en el Cruz Azul). En esa ocasión, no obstante que los titulares soltaron metralla, quedamos cero a cero.
A la mañana siguiente, El Sol de Tampico publicaría en su página deportiva: “Ni el “Orejón” López, en sus mejores tiempos, detuvo tantos disparos como Antonio Lomas”. Precisamente, Lomas Delgado pertenecería a las reservas del Club Deportivo Tampico desde los 17 años, destacándose como goleador, ya que en un partido, siendo dirigido por Nito Veiga, “Los jaiberos” golearían al rival 13 a 0, anotando 7 goles. - Conocí en el extinto estadio “Tampico” (ubicado sobre la avenida Ejército Mexicano, donde ahora se encuentra el Deportivo Español), jugadores de valía: Rolando, Pineda, Pérsico, Saint André, Molina y técnicos efectivos: Nicolás Palma, Candía, Grimaldo, Bella Kalloi, todos construyendo la historia porteña del futbol.
TORNEO 80-81
Tampico FC desplegaría una importante gira en la Península Ibérica, invitados por el promotor Juan Pareja Alcoy. -Obtuvimos magníficos resultados - precisa Lomas -, ganamos el trofeo “Ciudad de Cáceres” y un segundo lugar en Valladolid. Dejamos huella porque ninguna escuadra mexicana ha jugado tantos partidos en España, que fueron 9, en casi un mes. Otro aspecto que aprovecharía Antonio Lomas fue la de establecer contacto con diferentes directivos españoles. - Asistí a las instalaciones del Real Madrid - agrega Lomas Delgado - para aprender de la organización de un equipo de prosapia, su logística, programación, sus viajes, alimentación. Estuve una semana en sus entrenamientos. De hecho, me invadió la admiración al descubrir que dentro del “Santiago Bernabéu” contaban con una farmacia para los jugadores y sus familiares.
Durante su estancia como directivo jaibo, Lomas Delgado desarrolló una excelente relación con los altos mandos federativos. - En uno de esos viajes de trabajo, don Rafael Del Castillo - puntualiza Lomas - preguntó si queríamos que la Selección Mexicana se presentara en el “Tamaulipas”. Rápidamente informé a mi hermano Paulino, quien aceptó la invitación. La Selección jugó ante la escuadra alemana de VFL Bochum en abril de 1981, ganando los aztecas 1 a 0, con gol de Tomas Boy a pase de Hugo Sánchez. En este encuentro tendría una actuación destacada, portando la playera verde, Sergio Lira quien ya jugaba para el Atlante.
EN EL ESTO, 1981-82
En el periódico Deportivo “Esto”, aparece en su portada principal la imagen de Leopoldo Jacinto Luque, contratación “Bomba” de esa temporada porque no la realizaba ninguno de los equipos llamados grandes, sino la Jaiba Brava. - Incluso fue hasta extraño -detalla Antonio Lomas - porque se trataba de un campeón del mundo vigente, que había conseguido con su Selección el Mundial Argentina 78. Era el tiempo en que la mayoría se marchaba a Europa donde les pagaban muchísimo. Luque, de trato amable y sencillo, solamente solicitó 170 mil dólares, además de que el club otorgara durante su estadía en el puerto casa y coche.
Para Antonio Lomas Delgado el futbol actual ha cambiado totalmente, elevándose en demasía los precios de los jugadores. - Conseguimos a “Paco” Castrejón, portero del América y de la Selección Mexicana -explica Lomas - y no tuvimos que pagarle más que su sueldo; por ejemplo, Castrejón con “Los Cremas” ganaba 25 mil pesos mensuales, con Tampico ganó el doble, en eso se significaba la ganancia del jugador, que se aumentaba el sueldo, además de casa y carro, quedando su sueldo casi libre, así se manejaba el futbol de antaño. Carlos Gómez costó 3 millones de pesos, pero ese dinero sólo fue para el Monterrey, ahora en la actualidad se maneja un porcentaje de la venta para el jugador.
Lo maravilloso del futbol es que su magia trasciende las canchas, tribunas, produce pasión, sobre todo fraternidad, y en este tenor Antonio Lomas reconoce que gracias a la pelota ha contado con magnas amistades. - En una ocasión, en mi cumpleaños, venía “Pumas” a jugar al Tamaulipas - revela Lomas -, al término del partido invité a “Bora” una carne asada, como salía su avión al anochecer comentó que asistiría. Cuando principiaron a arribar los jugadores del Tampico que había invitado, incluso mi hermano Paulino, se llevaron la sorpresa al encontrarlo en mi casa. En esa reunión “Bora” explicó que teníamos un diamante en bruto porque existía un amplio semillero de jugadores que brotaban de nuestra cantera jaiba, que lo expresara Milutinovic fue orgullo para todos, porque venía de alguien que trabajaba con Universidad, que en ese momento producía en sus fuerzas básicas infinidad de jugadores.
Ya han sucedido más de cuatro décadas en que Paulino Lomas, contratista de Pemex, adquirió al ingeniero Felipe Arregui el equipo de futbol y el estadio “Tamaulipas”, paquete que costó 30 millones de pesos. - Al principio mi hermano no quiso aparecer como dueño - aduce Antonio Lomas - siendo Víctor Ramírez, que se desempeñaba como gerente de Cinemas 70´s de Tampico, quien apareció como presidente, ya después se conoció la verdad. Particularmente me encantó la idea que Paulino comprara al Tampico porque el futbol lo he disfrutado de sobremanera. Hasta la fecha continúo observándolo, recordándolo como una etapa bonita de mi vida, cuando estuve de directivo de futbol.