Para Antonio Balderas Pérez, su paso por el arbitraje profesional en primera división le ha deparado grandes satisfacciones desde que inició su andar en esta actividad hace más de 36 años, cuando era un estudiante de bachillerato y llegó a estar presente en los estadios más importantes del país.
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En entrevista para El Sol de Tampico, Toño Balderas, quien como árbitro asistente participó en 68 encuentros en el máximo circuito, cuenta sobre sus experiencias, partidos difíciles en los que tuvo oportunidad de estar presente, hace un análisis de quienes han sido a su juicio los mejores en esta actividad y relata cómo sigue presente en el arbitraje aunque hoy en día en el ámbito amateur.
"Fue por el año 1984, yo estudiaba el bachillerato en el CBTIS 103 ahí por el estadio Tamaulipas, teníamos un torneo interno ahí en el instituto y en aquel tiempo se nos complicaba mucho pagar un colegiado, un árbitro oficial", recuerda.
EL PRIMER UNIFORME
Para ser árbitro hay que parecerlo, por supuesto, y a Toño Balderas le faltaba una pieza importante: el uniforme. "Cuando ingreso ya de manera formal, empecé como todos, en los partidos infantiles, y me pasó una cosa muy curiosa porque yo tenía un amigo que era árbitro profesional, Felipe Pérez, y le pedí que me vendiera un uniforme viejito, porque yo no tenía uniforme, no tenía nada, y me regaló un uniforme Adidas.
"En aquel tiempo traer un Adidas era de lujo, y me quedó muy bien el uniforme, era de mi talla, y me presenté a pitar y la imagen que yo transmitía les gustó mucho a los de la Liga y me debutaron en la categoría Libre, con los mayores. Yo, sin tener mucha experiencia, pues había pitado dos semanas en las infantiles y luego luego dirigí en la categoría mayor, comencé a arbitrar y así fue como surgió esa inquietud de hacerme árbitro profesional, ahí estuve en la Liga Petrolera en el Siete y Medio de 1984 a 1987, que es cuando me invitan a hacer las pruebas para ingresar al sector profesional", añade.
INVITACIÓN AL ARBITRAJE PROFESIONAL
"Hubo una invitación del profesor José Luis Rivas Argáez, quien era el jefe de la Delegación de Árbitros de Tamaulipas", recuerda. "En aquel tiempo, por algunas razones que desconozco, el grupo se había disminuido bastante, quedaban solo seis árbitros en la delegación y el 'profe' tenía la inquietud de fortalecer el grupo de tener más elementos, aparte estaba en proceso la formación de la Zona Noreste de la Tercera División, de ahí surgió Jaibos y eso implicaba que iba a haber más actividad profesional y esa era la inquietud, fortalecer el grupo y fue así como surgió la oportunidad de presentar los exámenes para ingresar al sector profesional".
¿Cómo se da tu debut en el arbitraje profesional?
"Fue en Tercera División, en el 87-88 ya ingreso al sector profesional y yo debuto en Ciudad Valles, en un partido entre Unión Deportiva Vallense contra Académicos, fue mi primer juego como árbitro profesional".
"En Primera División fue algo muy curioso, porque justamente cuando yo debuto en Tercera División, y la siguiente semana me designan para el Torneo Nacional de Reservas como árbitro central en un juego del Tampico-Madero y a los quince días jugó la Jaiba Brava y ¡sorpresa!, que me llega la designación a Primera División, teniendo yo tres semanas de haber ingresado al sector profesional, fue un partido Tampico-Madero ante Tecos y me toca debutar.
"La verdad que a mí y a todos nos sorprendió, porque nadie pensaba que me fueran a dar la oportunidad tan rápido y me la dieron y, bueno, pues ahí empecé esa etapa bonita de la Jaiba Brava cuando el estadio se llenaba, me tocó vivir también la etapa moderna pero, eso sí, alcancé a rasguñar un poco de la historia de la Jaiba".
En el arbitraje tamaulipeco, afirma, "se vivieron dos etapas, la etapa moderna y la de los 90 para atrás en donde por lo regular los árbitros que venían a dirigir en Primera División, aquí en el estadio Tamaulipas eran de la capital o de Jalisco y los asistentes eran locales, lo mismo sucedía en Ciudad Victoria; la Delegación Tamaulipas tenía sedes en Ciudad Victoria y en Tampico, ahí era su rama de actividad.
"No hay que confundirse, no quiere decir que yo haya sido el primer árbitro o primer asistente en Primera División, hubo muchos pero aquí, a nivel local, es decir, Victoria o Tampico, pero el primero que empezó a salir a otros lugares, me tocó a mí ese privilegio; claro, anteriormente había sido Isidro Zapata pero muy esporádicamente, no fue muy constante y, bueno, nos costó invertir, ir a México, a las juntas, a las charlas, todavía sin estar regularmente participando en Primera División, más bien pitaba en Tercera y en Segunda".
RECUERDOS EMOTIVOS
De partidos emocionantes en los que estuvo presente recuerda que "en Primera División recuerdo uno de liguilla, entre Tigres y Pachuca, en el Volcán. La verdad es que siempre dije que participar como árbitro en el Volcán es otra cosa, es un ambiente estupendo, la gente si bien es cierto te presiona, porque en todos los estadios la gente presiona al árbitro, no es grosera, no es corriente, es algo que disfrutas".
DUELO COMPLICADO
"Me acuerdo de un partido donde estuvo de por medio nuestra integridad física, la final de Segunda División por el ascenso a Primera A, en aquel tiempo entre Cihuatlán contra Juárez en Ciudad Juárez, donde sí se puso muy fea la cosa e incluso llegó un momento en que pensé que nos iban a linchar, porque fue un partido envuelto en muchas polémicas, de hecho venía ya envuelto en una polémica en el partido de ida que dirigió Felipe Ramos Rizo, pues habían expulsado a Pepe Camacho, que era el entrenador de Ciudad Juárez", recuerda Antonio Balderas.
"En el video se ve que voy con Pepe y se ve que algo le digo: te dije que no te calentaras, eso le impresionó al doctor Codesal y después de tanto tiempo platico con Pepe y siempre nos saludamos, y me dice: gracias a mí pitaste una final de Primera A, ja, ja, ja".
EL MEJOR ÁRBITRO
"Arturo Brizio Carter ha sido para mí el árbitro más completo, el más seguro, con elegancia, tenía esa magia, me tocó muchas veces ser parte de su equipo y tenía una forma tan práctica de dirigir un encuentro, yo me acuerdo que una vez, cuando le preguntaron a Bielsa, que dirigía al Atlas, él contestó: yo no sé si sea el mejor, pero cuando Brizio está en la cancha, da la sensación de que todo va a estar bien".