Representar las tradiciones de nuestro país portando bellos y coloridos vestuarios típicos de distintas entidades es lo que más disfrutan Andrea Esperanza Martínez Ramos y Ana Josabeth Bolado Díaz durante las fiestas de septiembre con motivo de la Independencia de México.
EL SOL DE TAMPICO tuvo la oportunidad de compartir una divertida sesión de fotos en la Plaza de Armas con las talentosas y destacadas bailarinas del Ballet Folclórico Cuauhtli, el cual se fundó hace aproximadamente 9 años y es dirigido por el Mtro. Armando Javier Martínez Carreón y la Mtra. Esperanza Ramos Peña.
Durante la amena charla, las jóvenes estudiantes de nivel superior remarcaron la importancia de seguir abriendo espacios para que este tipo de agrupaciones, que tienen como noble propósito continuar con el legado de nuestros antepasados, puedan dar a conocer las costumbres y tradiciones mexicanas a las nuevas generaciones.
En este sentido mencionaron el ballet, con casi una década de trayectoria, estará participando el 14 de septiembre en las Tardes de Folclor que se realizan en la peatonal del primer cuadro de Tampico; el 15 de septiembre acudirán a la explanada de la presidencia municipal de Madero y el 21 ofrecerán una vistosa muestra de baile y talento en la Plaza Isauro Alfaro, donde compartirán el escenario con el Ballet Folclórico Yacatecutli, del Mtro. Gil Alberto Martínez Carreón.
Por otra parte, aprovecharon para subrayar que nuestra nación es rica en colores, sabores, cultura y hermosos paisajes, por lo que debemos sentirnos orgullosos de haber nacido y vivir aquí.
“Además de las galas de baile, otra cosa que me gusta mucho es la gastronomía mexicana, los festejos patrios son una gran oportunidad para degustar antojitos como sopes, flautas, pozole y tostadas”, describieron Ana y Andrea, quienes actualmente cursan la licenciatura en Psicología y la licenciatura en Diseño Gráfico, repectivamente.
Al gozar de la cálida tarde en el Centro Histórico de Tampico, abordaron el tema de que niños y niñas se acerquen a practicar alguna disciplina, ya que además de crear amistades con sus mismos gustos y pasiones, los motiva a ser mejores cada día y a sentirse orgullosos de sí mismos, lo que conlleva al orgullo de ser mexicano.
"Para nosotras es un honor portar estos vestuarios y bailar desde huapangos, hasta polcas y jarabes. Los aplausos, los comentarios positivos y también las críticas hacia nuestras áreas de oportunidad, pero sobre todo, el demostrar que estamos orgullosas de nuestras raíces, es un privilegio", concluyeron las carismáticas bailarinas de folclor.