A todos niveles de gobierno en nuestro país, últimamente se está manejando la cuestión turística. Aprovechando la belleza natural y la habilidad de sus artesanos, programas por todos lados, exhibiciones, museos, parques, jardines, ferrocarriles escénicos y cuanto más.
A propósito de lagunas y desarrollo turístico, no nos podía faltar nuestra contribución al asunto, en cuanto a nuestra hermosa Laguna del Carpintero, de belleza excepcional, con un “PERO”... “JUANCHO”, que dice: “NO SE METAN EN MIS TERRENOS”.
En lo personal, me parece que “JUANCHO” está abusando, no solo anda en las lagunas, en las banquetas, en las calles, sino también en las playas, espantando a los turistas y a los locales.
¿Qué, no habrá alguna oficina que se ocupe de JUANCHO y lo ponga en su casa, y permita gozar plenamente de la hermosa laguna?
Nuestra laguna y muchos paseos de la ciudad necesitan la vigilancia de la Policía Preventiva desaparecida, pues tal parece que a mucha gente le gusta destruir y, como dijo Isabel Arvide, “para que este espacio siga siendo bello, hay que cuidarlo, y cuidarlo mucho”...