/ viernes 21 de junio de 2024

Las mañaneras de Sheinbaum

Por Gerson Hernández Mecalco

Claudia Sheinbaum tendrá una vez a la semana una mañanera con su estilo personal de gobernar. La Presidenta electa con más votos en la historia reciente de México, tiene dos de los tres tipos de autoridad; de acuerdo con Max Weber: Legal y tradicional, aunque se ría mucho le hace falta el carisma, pero tendrá seis años para adherir esa simpatía que no se mide solamente con votos.

Estrategia. Idealmente las mañaneras serán los lunes a las 07:00 horas, en Palacio Nacional, y la acompañarán uno o dos secretarios. Los temas serán divididos en: Economía, desarrollo social y seguridad. ¡Ojo! harán todo lo posible para cambiar la percepción de sus críticos acerca de la ingobernabilidad en algunos territorios del país, y por esa razón el tema de inseguridad será el menos comentado; aunque la realidad opine lo contrario.

El estilo del formato de la Doctora Sheinbaum será más organizado, debido a su formación académica. Primero presentarán un documento con diapositivas y vídeos, a píe de página se citarán las fuentes oficiales, que argumentan sus dichos, minutos después tomarán el micrófono los voceros para responder las preguntas técnicas; la Doctora no se desgastará en detalles. Y lo más importante no habrá improvisaciones, es decir que no pedirá que le pongan el “¿Quién pompo?” de Chico Che o la voz de algún personaje de la caricatura de don Gato.

Crisis. En situaciones especiales mandará sus fichas por delante, ella evitará desgastarse, pero siempre estará frente al timón, para ello siempre estará su secretario de Gobernación y ahí enviará otro mensaje que descifraremos en la simbología del poder; ya que valdrá la pena observar si los máximos voceros de la Sedena y la Marina la acompañarán o se quedarán en sus cuarteles. Dicen los que saben que aquí veremos el desmarque o no de las instituciones castrenses en su estilo personal de gobernar.

Estados. Será en las entidades donde las y los gobernadores la arroparán en sus mañaneras; ahí presentará los detalles de los polos de desarrollo que fueron tan mencionados en campaña. En esos formatos foráneos observaremos si, así como ocurrió en estos seis años, la prensa local es crítica a las acciones de Palacio Nacional. Allá en Oaxaca y otros estados, gobernadores como Salomón Jara mostrarán su músculo electoral en apoyo al llamado segundo piso de la transformación del país.

La relación entre el poder político y los medios no variará, como cada sexenio los dueños de los aparatos ideológicos del Estado (dixit Louis Althusser) muestran, porque no les queda de otra, un guiño de buena voluntad porque la relación apenas comienza; esto no variará. Lo que veremos en el ejercicio periodístico será una nueva etapa en la relación con los nuevos funcionarios públicos.

Muchas de las reformas que se aprobarán en semanas, generarán las críticas de medios y organizaciones que consideran que la desaparición de instituciones provoca un desbalance en los contrapesos al poder gubernamental. En las mañaneras se continuará cuestionando este y otros temas y será interesante —eso espero— que exista no solo un diálogo si no una rendición de cuentas —entre los gobernados y los gobernantes—, que en el primero de los casos son más de 35 millones de mexicanos (uno de cada tres).

Todo lo anterior no son especulaciones, sino una propuesta para el equipo entrante de Comunicación Social de Presidencia. Una conferencia a la semana con objetivos precisos, macizos y concisos; que cuiden a la primera mandataria de un revuelo de declaraciones y que el aparato gubernamental muestre su expertis en la vocería del pódium más importante del país. Ojalá.

*Comunicólogo político, académico de la FCPyS UNAM y Maestro en Periodismo Político

@gersonmecalco


Por Gerson Hernández Mecalco

Claudia Sheinbaum tendrá una vez a la semana una mañanera con su estilo personal de gobernar. La Presidenta electa con más votos en la historia reciente de México, tiene dos de los tres tipos de autoridad; de acuerdo con Max Weber: Legal y tradicional, aunque se ría mucho le hace falta el carisma, pero tendrá seis años para adherir esa simpatía que no se mide solamente con votos.

Estrategia. Idealmente las mañaneras serán los lunes a las 07:00 horas, en Palacio Nacional, y la acompañarán uno o dos secretarios. Los temas serán divididos en: Economía, desarrollo social y seguridad. ¡Ojo! harán todo lo posible para cambiar la percepción de sus críticos acerca de la ingobernabilidad en algunos territorios del país, y por esa razón el tema de inseguridad será el menos comentado; aunque la realidad opine lo contrario.

El estilo del formato de la Doctora Sheinbaum será más organizado, debido a su formación académica. Primero presentarán un documento con diapositivas y vídeos, a píe de página se citarán las fuentes oficiales, que argumentan sus dichos, minutos después tomarán el micrófono los voceros para responder las preguntas técnicas; la Doctora no se desgastará en detalles. Y lo más importante no habrá improvisaciones, es decir que no pedirá que le pongan el “¿Quién pompo?” de Chico Che o la voz de algún personaje de la caricatura de don Gato.

Crisis. En situaciones especiales mandará sus fichas por delante, ella evitará desgastarse, pero siempre estará frente al timón, para ello siempre estará su secretario de Gobernación y ahí enviará otro mensaje que descifraremos en la simbología del poder; ya que valdrá la pena observar si los máximos voceros de la Sedena y la Marina la acompañarán o se quedarán en sus cuarteles. Dicen los que saben que aquí veremos el desmarque o no de las instituciones castrenses en su estilo personal de gobernar.

Estados. Será en las entidades donde las y los gobernadores la arroparán en sus mañaneras; ahí presentará los detalles de los polos de desarrollo que fueron tan mencionados en campaña. En esos formatos foráneos observaremos si, así como ocurrió en estos seis años, la prensa local es crítica a las acciones de Palacio Nacional. Allá en Oaxaca y otros estados, gobernadores como Salomón Jara mostrarán su músculo electoral en apoyo al llamado segundo piso de la transformación del país.

La relación entre el poder político y los medios no variará, como cada sexenio los dueños de los aparatos ideológicos del Estado (dixit Louis Althusser) muestran, porque no les queda de otra, un guiño de buena voluntad porque la relación apenas comienza; esto no variará. Lo que veremos en el ejercicio periodístico será una nueva etapa en la relación con los nuevos funcionarios públicos.

Muchas de las reformas que se aprobarán en semanas, generarán las críticas de medios y organizaciones que consideran que la desaparición de instituciones provoca un desbalance en los contrapesos al poder gubernamental. En las mañaneras se continuará cuestionando este y otros temas y será interesante —eso espero— que exista no solo un diálogo si no una rendición de cuentas —entre los gobernados y los gobernantes—, que en el primero de los casos son más de 35 millones de mexicanos (uno de cada tres).

Todo lo anterior no son especulaciones, sino una propuesta para el equipo entrante de Comunicación Social de Presidencia. Una conferencia a la semana con objetivos precisos, macizos y concisos; que cuiden a la primera mandataria de un revuelo de declaraciones y que el aparato gubernamental muestre su expertis en la vocería del pódium más importante del país. Ojalá.

*Comunicólogo político, académico de la FCPyS UNAM y Maestro en Periodismo Político

@gersonmecalco