Con el indiscutible liderazgo del estado en sus manos, el gobernador Américo Villarreal Anaya inició la semana convocando a los 43 presidentes municipales a una ceremonia solemne en la que inauguró la remodelación del Palacio de Gobierno en la capital del estado e invitó a cada edil a que develara los escudos de armas de cada uno de sus municipios, para después encabezar una reunión con todos ellos y su gabinete estatal en la que dejó en claro las prioridades de su gobierno, basadas en la honestidad y en ver primero por los más necesitados.

Tal cual, uno de los principales objetivos del gobierno de Américo Villarreal está en el combate a la extrema pobreza, con aquella premisa de la cuarta transformación de que por el bien de todos, primero los pobres, el gobernador instruyó a su gabinete y expuso a los alcaldes del estado a colocar en el centro de las acciones más urgentes a los que menos tienen, no sólo a brindarles la ayuda y los programas institucionales que desde los tres niveles de gobierno hay para ellos, sino a censarlos, a ubicarlos y a brindarles toda la ayuda posible para que salgan de esas circunstancias de vida, en la que día a día, no saben qué comerán ni ellos ni sus familias. Llegarán a ellos, a los pobres de los pobres con oportunidades, con despensas, becas, programas de empleo y autoempleo, con ayuda médica y asistencial, con la firme idea de que salgan de una vez por todas de esta condición. Viene aquí otro principio de los gobiernos de la transformación, uno tomado de la mismísima voz de Benito Juárez García, que retomó el ahora expresidente Andrés Manuel López Obrador y que ha tomado también como una de sus banderas la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo: “No puede haber gobierno rico con pueblo pobre”. Fuera excesos, fuera lujos y canonjías de los gobiernos en todos sus niveles. Fuera la deshonestidad, la corrupción y los excesos. Un golpe directo a muchos de los presentes en la reunión que aún se manejan en camionetas último modelo, con grandes aparatos de seguridad, constantes viajes, hoteles de cinco estrellas y comidas consuetudinarias en restaurantes de lujo. Se acabó. La “línea” es clara, la austeridad republicana debe llegar a cada rincón de México y sus consecuencias también, siempre en beneficio del pueblo. Ahí está el contraste tan evidente entre la pobreza extrema y muchos gobernantes del pasado, cuyos lujos lastimaron por tantas décadas a la gente. Otro de los claros mensaje de Américo Villarreal para los alcaldes, fue terminar con la simulación. Ninguno le debe jugar al “tío lolo”. Ahí estuvo en la reunión el auditor superior del estado, Francisco Noriega Orozco, para mostrarles a los alcaldes el nuevo rostro de la rendición de cuentas en Tamaulipas. El auditor superior resaltó un cambio crucial en la fiscalización estatal, alejándose de prácticas superficiales y fortaleciendo la auditoría como un instrumento verdadero de transparencia y rendición de cuentas, no como se hacía anteriormente cuando se realizaban “auditorías de chocolate”. Al enfatizar en esta transformación, el auditor Noriega Orozco hizo un llamado a las autoridades municipales a tomar en serio la rendición de cuentas y a evitar prácticas que antes pasaban desapercibidas. Este enfoque refleja la visión de un gobernador que ha puesto la honestidad y la transparencia como ejes centrales de su gobierno. No sólo eso, es un recordatorio de que los ojos de la Auditoría Superior del Estado estarán sobre los ayuntamientos. Ahí también entró la Contralora Norma Angélica Pedraza Melo quien recordó a los ediles la importancia de la ética y la legalidad en cada uno de los procesos de gobierno. Las contralorías deben tener un papel activo y ser capaces de aplicar la normativa federal, estatal y municipal de manera rigurosa, permitiendo que cada peso gastado esté justificado y que el ciudadano sepa en qué se invierten sus impuestos. Esta no es solo una tarea técnica, sino un esfuerzo ético y moral que asegura la confianza en las instituciones. Es un esfuerzo por crear una administración pública más humana, que coloca al ciudadano y su bienestar en el centro de sus acciones.

EL SEMÁFORO EN COLOR VERDE

La mañana del martes el secretario de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social, Raúl Quiroga Álvarez encabezó en Miramar la reunión del “Semáforo del Cuidado del Agua” que habla del buen momento que hay en nuestra región en cuanto a la captación del vital líquido. Junto a los alcaldes Mónica Villarreal Anaya, Erasmo González Robledo y Armando Martínez, evaluaron la situación y acordaron acciones a futuro, en una reunión coordinada por el gerente de la Comapa Sur, Francisco José González Casanova. Para el caso del norte del estado vienen grandes proyectos hidráulicos, como lo dio a conocer la Presidenta de la República.

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