/ martes 24 de septiembre de 2024

Imagínese / El Legado de AMLO a Tamaulipas

En su última semana al frente del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo ayer en Tamaulipas para rendir homenaje a Catarino Erasmo Garza Rodríguez, un revolucionario y periodista tamaulipeco cuyo legado permaneció en el olvido durante décadas.

La develación de su escultura en Matamoros, su ciudad natal, es más que un simple acto protocolario; es un recordatorio del constante apoyo que el presidente ha brindado a Tamaulipas y a su gente. Este significativo evento contó con la presencia de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo y de importantes miembros del gabinete, lo que resalta la relevancia del momento y reafirma el compromiso del gobierno federal con el estado.

Desde el inicio de su administración, López Obrador mostró un compromiso especial con Tamaulipas, reconociendo su potencial y la necesidad de cambiar la narrativa de décadas de malos gobiernos. Apenas nueve días después de que el doctor Américo Villarreal Anaya asumiera como gobernador, el presidente llegó a Tamaulipas y aseguró que el pueblo había demostrado ser un ejemplo de democracia, anunciando que regresaría con todo su gabinete para reforzar el apoyo a la nueva administración… y así fue.

Ocho días después, el presidente volvió con todo y su gabinete para presentar el Plan de Apoyo a Tamaulipas, un proyecto integral que reflejó la visión del presidente sobre un estado que, a pesar de las adversidades, nunca dejó de luchar por un futuro mejor.

En cada visita, López Obrador reconoció el esfuerzo del pueblo de Tamaulipas, que se enfrentó a amenazas y desafíos históricos para lograr una renovación política y social. Así como el inmenso aprecio por el gobernador a quien describió como "un hombre recto, íntegro, trabajador, humano y honesto", asegurando que era lo mejor que le había pasado a Tamaulipas.

La cercanía y respaldo del presidente no sólo se limitaron a palabras. Su visión de un Tamaulipas con mucho potencial, clave para la economía de México debido a su vecindad y relación con Texas, se materializó en importantes proyectos de infraestructura, como la aprobación de nuevos puentes fronterizos en colaboración con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.

El homenaje a Catarino Garza en Matamoros no es sólo un acto simbólico, sino un recordatorio del lugar especial que Tamaulipas siempre ocupó en el corazón de López Obrador. Su legado en el estado es innegable: más seguridad, más oportunidades económicas y un reconocimiento constante al valor y la determinación del pueblo tamaulipeco.

En un país que durante mucho tiempo les dio la espalda, el presidente vio en Tamaulipas un estado de esperanza, de lucha y de transformación. Hoy, con el regreso de los restos de Catarino Erasmo Garza a su tierra natal y la develación de su monumento, se cierra un ciclo que honra la historia de un estado que nunca se rindió, y que, bajo el liderazgo de Américo Villarreal y el respaldo de López Obrador, continúa construyendo un futuro digno de su gente.

La presencia de la presidenta electa y los altos miembros del gabinete en esta gira es un testimonio de la importancia histórica de este evento y del compromiso de seguir avanzando por Tamaulipas.

Este es un claro ejemplo de que, como dicen en la cuarta transformación, amor con amor se paga; ahí están los resultados electorales en los que Morena y sus aliados arrasaron en todo Tamaulipas borrando prácticamente a la oposición que ni las manos metió. A partir del martes Morena gobernará prácticamente todo el territorio estatal y tendrá además la mayoría calificada en el Congreso del Estado, lo que permitirá que más beneficios lleguen a donde más se necesitan.

TAMAULIPECOS EN EL CÓNCLAVE DE MORENA

De la mano de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, que por cierto tomó licencia como militante de su partido, el Consejo Nacional de Morena realizado el domingo en el World Trade Center de la Ciudad de México congregó a los consejeros nacionales para elegir a su nueva dirigencia. Sangre nueva, encabezada por Luisa María Alcalde Luján, como dirigente del partido, Carolina Rangel Gracida, como secretaria general y Andrés Manuel López Beltrán como secretario de organización.

Junto al resto del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, ninguno de sus miembros rebasa los 40 años de edad, lo que habla de la apuesta a futuro del movimiento. La delegación tamaulipeca estuvo representada por el gobernador Américo Villarreal Anaya, la senadora Olga Sosa Ruiz, diputados federales como Carlos Canturosas Villarreal, diputados locales como Úrsula Patricia Salazar Mojica, y los alcaldes; entre ellos Mónica Villarreal Anaya, Erasmo González Robledo, Armando Martínez Manríquez, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, entre otros; lo que demuestra la fuerza de Morena en el país, en el legislativo, en el estado y en los municipios.

marioagamezh@hotmail.com

En su última semana al frente del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo ayer en Tamaulipas para rendir homenaje a Catarino Erasmo Garza Rodríguez, un revolucionario y periodista tamaulipeco cuyo legado permaneció en el olvido durante décadas.

La develación de su escultura en Matamoros, su ciudad natal, es más que un simple acto protocolario; es un recordatorio del constante apoyo que el presidente ha brindado a Tamaulipas y a su gente. Este significativo evento contó con la presencia de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo y de importantes miembros del gabinete, lo que resalta la relevancia del momento y reafirma el compromiso del gobierno federal con el estado.

Desde el inicio de su administración, López Obrador mostró un compromiso especial con Tamaulipas, reconociendo su potencial y la necesidad de cambiar la narrativa de décadas de malos gobiernos. Apenas nueve días después de que el doctor Américo Villarreal Anaya asumiera como gobernador, el presidente llegó a Tamaulipas y aseguró que el pueblo había demostrado ser un ejemplo de democracia, anunciando que regresaría con todo su gabinete para reforzar el apoyo a la nueva administración… y así fue.

Ocho días después, el presidente volvió con todo y su gabinete para presentar el Plan de Apoyo a Tamaulipas, un proyecto integral que reflejó la visión del presidente sobre un estado que, a pesar de las adversidades, nunca dejó de luchar por un futuro mejor.

En cada visita, López Obrador reconoció el esfuerzo del pueblo de Tamaulipas, que se enfrentó a amenazas y desafíos históricos para lograr una renovación política y social. Así como el inmenso aprecio por el gobernador a quien describió como "un hombre recto, íntegro, trabajador, humano y honesto", asegurando que era lo mejor que le había pasado a Tamaulipas.

La cercanía y respaldo del presidente no sólo se limitaron a palabras. Su visión de un Tamaulipas con mucho potencial, clave para la economía de México debido a su vecindad y relación con Texas, se materializó en importantes proyectos de infraestructura, como la aprobación de nuevos puentes fronterizos en colaboración con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.

El homenaje a Catarino Garza en Matamoros no es sólo un acto simbólico, sino un recordatorio del lugar especial que Tamaulipas siempre ocupó en el corazón de López Obrador. Su legado en el estado es innegable: más seguridad, más oportunidades económicas y un reconocimiento constante al valor y la determinación del pueblo tamaulipeco.

En un país que durante mucho tiempo les dio la espalda, el presidente vio en Tamaulipas un estado de esperanza, de lucha y de transformación. Hoy, con el regreso de los restos de Catarino Erasmo Garza a su tierra natal y la develación de su monumento, se cierra un ciclo que honra la historia de un estado que nunca se rindió, y que, bajo el liderazgo de Américo Villarreal y el respaldo de López Obrador, continúa construyendo un futuro digno de su gente.

La presencia de la presidenta electa y los altos miembros del gabinete en esta gira es un testimonio de la importancia histórica de este evento y del compromiso de seguir avanzando por Tamaulipas.

Este es un claro ejemplo de que, como dicen en la cuarta transformación, amor con amor se paga; ahí están los resultados electorales en los que Morena y sus aliados arrasaron en todo Tamaulipas borrando prácticamente a la oposición que ni las manos metió. A partir del martes Morena gobernará prácticamente todo el territorio estatal y tendrá además la mayoría calificada en el Congreso del Estado, lo que permitirá que más beneficios lleguen a donde más se necesitan.

TAMAULIPECOS EN EL CÓNCLAVE DE MORENA

De la mano de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, que por cierto tomó licencia como militante de su partido, el Consejo Nacional de Morena realizado el domingo en el World Trade Center de la Ciudad de México congregó a los consejeros nacionales para elegir a su nueva dirigencia. Sangre nueva, encabezada por Luisa María Alcalde Luján, como dirigente del partido, Carolina Rangel Gracida, como secretaria general y Andrés Manuel López Beltrán como secretario de organización.

Junto al resto del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, ninguno de sus miembros rebasa los 40 años de edad, lo que habla de la apuesta a futuro del movimiento. La delegación tamaulipeca estuvo representada por el gobernador Américo Villarreal Anaya, la senadora Olga Sosa Ruiz, diputados federales como Carlos Canturosas Villarreal, diputados locales como Úrsula Patricia Salazar Mojica, y los alcaldes; entre ellos Mónica Villarreal Anaya, Erasmo González Robledo, Armando Martínez Manríquez, Carmen Lilia Canturosas Villarreal, entre otros; lo que demuestra la fuerza de Morena en el país, en el legislativo, en el estado y en los municipios.

marioagamezh@hotmail.com