En estos días la Organización Mundial de la Salud ha lanzado una alerta epidemiológica de la viruela del mono; este virus es una zoonosis rara que infecta principalmente a los monos y que se propaga principalmente en África Central y Occidental, ha dado un salto preocupante al infectar a los seres humanos en diferentes partes del mundo. Esta alerta de la OMS pone a todos los sistemas de salud atentos del posible avance de este virus en el mundo. En una población extremadamente sensible después de haber vivido la pandemia de Covid-19.
La viruela del mono es causada por el virus del mismo nombre, un pariente cercano del virus de la viruela humana, pero menos letal. Los modos de trasmisión al ser humano son por contacto con animales infectados o personas que portan el virus. Entre los humanos es a través de aerosoles, contacto directo con lesiones de la piel de las personas infectadas y, en menor medida, a través de superficies contaminadas.
Debemos sospechar de la enfermedad en aquellas personas que presentan dolor de cabeza, fiebre, dolores musculares, fatiga y lesiones cutáneas que progresa a pústulas llenas de líquido. La mayoría de los casos son leves y se resuelven sin tratamiento específico, pero las personas que son inmunocomprometidas.
La mayoría de los casos de viruela del mono son leves y se resuelven por sí solos en unas pocas semanas. Sin embargo, en algunas personas, especialmente aquellas con sistemas inmunitarios debilitados o con comorbilidades, la enfermedad puede ser más grave, e incluso potencialmente mortal. Las complicaciones pueden incluir infecciones secundarias, neumonía y, en raras ocasiones, encefalitis (inflamación del cerebro).
No existe un tratamiento específico para la viruela del mono, debemos realizar medidas de prevención. Estos es evitar el contacto con personas que tengan síntomas sugestivos de enfermedad, evitar el contacto con animales que podrían estar infectados, en caso de un brote realizar el aislamiento de personas infectadas. La vacuna de la viruela dejó de utilizarse en 1980, es eficaz para prevenir la viruela del mono y algunos organismos regulatorios están considerando su uso. Debemos estar al pendiente de la evolución de esta nueva enfermedad y estar informados de las notificaciones internacionales y nacionales.
La viruela del mono es una nueva epidemia que nos hace recordar lo susceptibles que somos y debemos estar preparados para responder con eficiencia ante esta posible nueva pandemia. La educación y la prevención son las armas más poderosas para protegernos y evitar la propagación y mantener a nuestra población saludable.