En los últimos años, la evidencia científica ha demostrado cada vez más los beneficios de mantener la masa muscular a medida que envejecemos. Sin duda, conservar la masa muscular ayuda a preservar la fisiología de nuestro organismo. A veces, es difícil percibir cuándo estamos perdiendo masa muscular con el paso del tiempo. Esta pérdida se conoce como sarcopenia.
La sarcopenia es más común de lo que creemos. A partir de los 30 años, nuestro cuerpo pierde entre el 3% y el 5% de nuestra musculatura por década, un proceso que se acelera a partir de los 60 años. No sólo es un problema estético, sino que tiene serias implicaciones sobre nuestro metabolismo, calidad de vida y salud.
Uno de los principales beneficios de conservar la masa muscular es que estamos invirtiendo en nuestra movilidad futura, lo que disminuirá el riesgo de caídas y fracturas cuando seamos adultos mayores. Además, conservar la masa muscular ayuda a mantener mejores niveles de glucosa y reducir la grasa corporal, lo que trae consigo beneficios cardiovasculares. El músculo también participa en la regulación del sistema inmunológico, manteniéndolo en condiciones óptimas. Finalmente, no olvidemos que mantener la musculatura nos ayudará a conservar nuestra independencia a largo plazo.
Algunas de las causas de la pérdida de masa muscular (sarcopenia) son el envejecimiento en sí mismo, la disminución de hormonas como la testosterona o el estrógeno; Sin embargo, recordemos que el estilo de vida es clave para conservar una salud muscular adecuada. El sedentarismo, la nutrición deficiente y enfermedades crónicas como la diabetes, la insuficiencia cardíaca o la obesidad pueden contribuir a esta pérdida.
Debemos mantener una actividad física adecuada que incluya ejercicios de fuerza (resistencia), como levantar pesas, usar bandas elásticas o el propio peso corporal, lo que ayudará a mantener la salud de nuestros músculos. Una nutrición adecuada, con el consumo apropiado de todos los nutrientes y proteínas (1,2 gramos de proteína por kilogramo de peso), también será fundamental para conservar el tono muscular. Mantenernos activos es indispensable; Es importante motivarse a realizar diferentes actividades durante el día y no olvidar cuidar nuestra salud mental. Finalmente, es esencial realizar evaluaciones regulares con el médico para asegurar que nuestro estado de salud sea óptimo.
Muchas veces, la sarcopenia no se diagnostica de forma temprana, sino hasta que sufrimos una caída o sentimos una debilidad importante. Sin embargo, la detección temprana es crucial para una intervención efectiva. Existen dispositivos como la impedancia bioeléctrica o la DEXA, que pueden determinar la calidad del músculo y la grasa corporal, lo que permite intervenir de manera temprana.
Es inevitable envejecer, pero la pérdida de masa muscular no tiene por qué serlo. Con un estilo de vida activo, una buena nutrición y una evaluación adecuada, podemos tener una mejor calidad de vida en el futuro. El músculo no sólo nos hace más fuertes, sino que también nos mantiene saludables. Nunca es tarde para empezar a cuidar nuestra musculatura.