/ jueves 25 de mayo de 2023

Fractal | ¿Y mi nido dónde está?

Frecuentemente me cuestionan el por qué es muy común encontrar abandonados pequeños polluelos de aves y cachorros de mamíferos en esta época del año.

En primavera-verano, es el tiempo de reproducción, anidación y cría de muchas especies, las cuales ocupan los árboles existentes en nuestras ciudades y patios para hacer sus madrigueras o nidos, pero también es la época en la que los árboles se encuentran más llenos de follaje y muchos particulares o instancias de gobierno talan o podan a estos frondosos multifamiliares naturales, para evitar, lo que para ellos representa una molestia por los desechos de floración, frutos o caída de hojas.

Y es cuando las brigadas de podadores incrementan su carga de trabajo, pero por desgracia no se toma en cuenta que esos árboles, que para muchos son molestos generadores de “basura” también están llenos de vida y hogares, los cuales fueron realizados con arduo esfuerzo para dar paso a la esperanza de una nueva generación.

Gran cantidad de organismos en esta época son extremadamente susceptibles a cualquier cambio en su entorno, por tal motivo fumigaciones, quemas, desmontes o simplemente la poda del árbol en un parque o banqueta puede significar la muerte para muchos seres.

Imaginen a una familia construyendo su nido, recolectando por días o semanas ramitas, hojas y mil cosas para que los pequeños polluelos estén seguros, y de la nada cuando todo es felicidad y arduo trabajo para alimentar a los pequeños, y zas, una tragedia pasa.

La cuadrilla de podadores desapareció el nido y su precioso contenido en cuestión de minutos, y la esperanza de nueva generación desaparece sin un motivo razonable.

Otro de los problemas de podar o cortar árboles principalmente en esta época es que los pequeños que lograron sobrevivir tienen que iniciar sus entrenamientos de saltitos y vuelo, pero sin un follaje denso o árboles aledaños que funcionen como corredor de práctica, es casi segura la caída directa al suelo y por ende la muerte por depredación de felinos domésticos, por el impacto o simplemente deshidratados o atropellados por algún vehículo.

Por tal motivo exhorto a toda la población y dependencias gubernamentales evitar el corte o poda de árboles en temporada de primavera-verano, es más recomendable hacerlo en otoño-invierno a fin de salvaguardar la vida de muchas especies.

Hoy levanto la voz por todas las especies que coexisten en nuestras ciudades, las cuales llegan en ocasiones han llegado a mis manos, socorridas por humanos preocupados por su integridad para intentar salvar sus vidas, la pérdida de polluelos, tlacuaches, ardillas etc. es parte de la cadena natural, pero cuando esto sucede por la mala planeación o capricho de alguien, eso ya no es correcto ni justo.

Una buena logística, asesoría especializada y verificar los ciclos correctos para hacer arreglos de nuestras áreas verdes, es determinante para una tener una sana convivencia con nuestros vecinos de planeta.

Es mejor una ciudad llena de árboles y vida, que planchas de cemento, sombrillas o toldos ridículos los cuales son como banderas en la luna.

O ¿usted qué opina?

  • Regeneración 19.