/ lunes 22 de enero de 2024

El telar | Lo verdaderamente importante

El crecimiento exponencial de la inteligencia artificial nos ha colocado rápidamente en una nueva etapa de la era digital, este avance en muchos aspectos va delante de la evolución humana, a tal grado que en diferentes ámbitos se erige como una amenaza.

Refiero lo anterior no porque esgrima una cerrazón hacia los avances científicos y tecnológicos, de ninguna manera, simplemente comparto con ustedes mi preocupación genuina sobre sus repercusiones. Bienvenida la inteligencia artificial cuando se encuentra al servicio de las personas y contribuye a resolver muchas de sus problemáticas; sin embargo, no está haciendo así en todos los casos.

De acuerdo a los datos difundidos por diversos líderes mundiales pertenecientes a los ámbitos público y privados, la implementación de inteligencia artificial año con año a escala global conllevará a la significativa pérdida de empleos, particularmente en industrias como la del entretenimiento, información, logística, construcción y servicios financieros. En consecuencia, la lucha global para combatir la desigualdad deberá ser mucho más intensa, ya que por una lado la inteligencia artificial desplazará a las personas de sus puestos de trabajo, y por el otro, no todas las personas tendrán acceso a sus beneficios debido a las abismales diferencias en sus ingresos.

Junto a la irrupción de herramientas de inteligencia artificial como el ChatGPT diseñadas para para mantener conversaciones mediante un modelo de lenguaje ajustado han surgido otras maliciosas con fines delictivos que se pueden adquirir con cierta facilidad en la dark web y son utilizadas por la delincuencia para cometer fraudes bancarios, robo de identidad, producir pornografía, enganchar personas con fines de trata, difundir noticias falsas y generar desinformación.

La mayoría de las personas, pequeñas y medianas empresas se encuentran expuestas a estas herramientas maliciosas debido a que no tienen la información necesaria ni acceso a la protecciones necesaria.

En este mismo sentido, la inteligencia artificial generativa que desarrolla modelos capaces de crear datos, contenido o información de manera autónoma, como textos, música, imágenes, videos han sido aprovechados por las redes delictivas. No obstante, los instrumentos jurídicos para proteger a las personas se encuentran rezagados en todo el orbe, pues mientras el crimen es trasnacional y no respeta fronteras, las leyes siguen manteniendo un ámbito territorial específico que les impide imponer su imperio.

Esta revolución digital podría revitalizar la productividad, estimular el crecimiento de la economía mundial y contribuir a elevar los ingresos de los países con economías emergentes; también podría dar acceso al conocimiento a toda la humanidad, pero desafortunadamente hasta ahora no ha sido así. Al contrario, la tendencia es que profundizará las asimetrías y desigualdades existentes entre las naciones y las personas.

Para la niñez y juventudes la inteligencia artificial generativa mal empleada se erige como una amenaza debido a la ciberadicción y el aislamiento social que conlleva su uso inadecuado. Dicho de otra manera, la inteligencia emocional de las nuevas generaciones va quedando anulada frente a la artificial. Las relaciones familiares, personales e íntimas ya no son entre iguales, sino entre personas reales y virtuales.

Para que nuestras hijas e hijos dejen de permanecer sordos y ciegos debido a los audífonos, videojuegos, celulares, redes sociales, tabletas y computadoras tenemos que ofrecerles realidades diferentes en donde el tiempo y la presencia sean el elemento preponderante. Necesitamos darles el ejemplo, modelarles la importancia de mantener relaciones personales duraderas y nutricias. Necesitamos cocrear mejores dinámicas familiares en las que las charlas, las caminatas, el contacto con la naturaleza y la cultura, el deporte y la recreación sean actividades que posibiliten el desarrollo social, familiar y personal. Necesitamos evitar la prisa y la inmediatez, dejar de luchar contra el tiempo. Hay que pasar menos horas en internet y más en la vida, asumiendo que ésta no es artificial.

Es urgente eliminar de los hogares la violencia, reconstruir las relaciones interpersonales, apreciar a las personas, respetar y entender nuestro entorno. Entender que los seres humanos somos valiosos y formamos parte de un entramado ancestral y comunitario en donde nada es más importante.

  • blancanarro.telar@gmail.com


El crecimiento exponencial de la inteligencia artificial nos ha colocado rápidamente en una nueva etapa de la era digital, este avance en muchos aspectos va delante de la evolución humana, a tal grado que en diferentes ámbitos se erige como una amenaza.

Refiero lo anterior no porque esgrima una cerrazón hacia los avances científicos y tecnológicos, de ninguna manera, simplemente comparto con ustedes mi preocupación genuina sobre sus repercusiones. Bienvenida la inteligencia artificial cuando se encuentra al servicio de las personas y contribuye a resolver muchas de sus problemáticas; sin embargo, no está haciendo así en todos los casos.

De acuerdo a los datos difundidos por diversos líderes mundiales pertenecientes a los ámbitos público y privados, la implementación de inteligencia artificial año con año a escala global conllevará a la significativa pérdida de empleos, particularmente en industrias como la del entretenimiento, información, logística, construcción y servicios financieros. En consecuencia, la lucha global para combatir la desigualdad deberá ser mucho más intensa, ya que por una lado la inteligencia artificial desplazará a las personas de sus puestos de trabajo, y por el otro, no todas las personas tendrán acceso a sus beneficios debido a las abismales diferencias en sus ingresos.

Junto a la irrupción de herramientas de inteligencia artificial como el ChatGPT diseñadas para para mantener conversaciones mediante un modelo de lenguaje ajustado han surgido otras maliciosas con fines delictivos que se pueden adquirir con cierta facilidad en la dark web y son utilizadas por la delincuencia para cometer fraudes bancarios, robo de identidad, producir pornografía, enganchar personas con fines de trata, difundir noticias falsas y generar desinformación.

La mayoría de las personas, pequeñas y medianas empresas se encuentran expuestas a estas herramientas maliciosas debido a que no tienen la información necesaria ni acceso a la protecciones necesaria.

En este mismo sentido, la inteligencia artificial generativa que desarrolla modelos capaces de crear datos, contenido o información de manera autónoma, como textos, música, imágenes, videos han sido aprovechados por las redes delictivas. No obstante, los instrumentos jurídicos para proteger a las personas se encuentran rezagados en todo el orbe, pues mientras el crimen es trasnacional y no respeta fronteras, las leyes siguen manteniendo un ámbito territorial específico que les impide imponer su imperio.

Esta revolución digital podría revitalizar la productividad, estimular el crecimiento de la economía mundial y contribuir a elevar los ingresos de los países con economías emergentes; también podría dar acceso al conocimiento a toda la humanidad, pero desafortunadamente hasta ahora no ha sido así. Al contrario, la tendencia es que profundizará las asimetrías y desigualdades existentes entre las naciones y las personas.

Para la niñez y juventudes la inteligencia artificial generativa mal empleada se erige como una amenaza debido a la ciberadicción y el aislamiento social que conlleva su uso inadecuado. Dicho de otra manera, la inteligencia emocional de las nuevas generaciones va quedando anulada frente a la artificial. Las relaciones familiares, personales e íntimas ya no son entre iguales, sino entre personas reales y virtuales.

Para que nuestras hijas e hijos dejen de permanecer sordos y ciegos debido a los audífonos, videojuegos, celulares, redes sociales, tabletas y computadoras tenemos que ofrecerles realidades diferentes en donde el tiempo y la presencia sean el elemento preponderante. Necesitamos darles el ejemplo, modelarles la importancia de mantener relaciones personales duraderas y nutricias. Necesitamos cocrear mejores dinámicas familiares en las que las charlas, las caminatas, el contacto con la naturaleza y la cultura, el deporte y la recreación sean actividades que posibiliten el desarrollo social, familiar y personal. Necesitamos evitar la prisa y la inmediatez, dejar de luchar contra el tiempo. Hay que pasar menos horas en internet y más en la vida, asumiendo que ésta no es artificial.

Es urgente eliminar de los hogares la violencia, reconstruir las relaciones interpersonales, apreciar a las personas, respetar y entender nuestro entorno. Entender que los seres humanos somos valiosos y formamos parte de un entramado ancestral y comunitario en donde nada es más importante.

  • blancanarro.telar@gmail.com