/ miércoles 9 de octubre de 2024

El cumpleaños del perro / Algo sobre el cine de Nicolas Wending Refn

En Amazon Prime se encuentra disponible Sólo Dios perdona (Only God Forgives)/ Francia- Estados Unidos-Dinamarca-2013, del danés Nicolas Wending Refn. Cuando Crystal/ Kristin Scott Thomas le dice a Mai, la novia de su hijo Julian/ Ryan Gossling que su hijo Billy tenía el pene más grande que Julian, Nicolas Wending Refn sumerge su diástole fílmico en territorios de Freud y el halo onírico.

Crystal le exige a Julian le traiga la cabeza del asesino de su hijo preferido Billy. Julian, con el tufo de Adán de Santa sangre/ 1989, de Alejandro Jodorowsky, intentará ejecutar la orden materna.

Si en Drive/ 2011 el danés Nicolas Wending Refn había lapidado la estética del gore y el thriller con evidente auxilio del texto literario (el filme fue una adaptación de una novela de James Sallis), en Sólo Dios perdona lo hace desde la estilización y la atmósfera, elementos indudables de la poesía visual.

Da la impresión que Refn metió en una licuadora el cine de David Lynch, Tarantino, Sam Peckinpah, Kim-Ki-duk, Takeshi Kitano, Won Kar Wai, Chan-Wook Park y el Kenneth Bi de El latido del tambor/ 2007, y el resultado es este filme donde la monserga de la venganza es apenas la punta del iceberg para el planteamiento proto filosófico de restos de una tragedia shakesperiana y el mero gusto (válido, ¿no?) de un cine donde la luz matizada, apapachada en el diván de las tonalidades rojizas y la prolongación de los homenajes a otros cineastas tutores de Refn realizan no “el festín de Esopo” (según Octavio Paz) sino el de la reelaboración.

La irrupción de la americana Crystal en el mercado de Bangkok, donde la droga y la prostitución son el día a día, no detona nada extraordinario (buen acierto del guion de Refn), simplemente traslada a mansalva la rabia de una madre por la muerte de su hijo amado sin mayores explicaciones ontológicas (como Francois Ozon).