/ viernes 26 de marzo de 2021

Ambiente y desarrollo | Psicología ambiental

La problemática ambiental que enfrentamos hoy quizá es parte consecuencia de una mala concepción de sus causas de origen, y que nos ha llevado a poner al frente de las políticas y normatividades ambientales a profesionistas de las ciencias naturales que hoy necesitan apoyo urgente de otro grupo de especialistas.

Sin duda, los profesionales en ciencias naturales como los Biólogos, Ecólogos e incluso Geógrafos han contribuido ampliamente en la evaluación y dimensionamiento de las consecuencias del deterioro ambiental que hemos causado principalmente los seres humanos; pero los enfoques para dar solución a la causa raíz de las problemáticas ambientales han quedado fuera de sus capacidades perspectivas: esto habla mucho de la CONDUCTA DEL SER HUMANO.

Hemos entendido casi a la perfección, por ejemplo, el Ciclo hidrológico y las consecuencias que tienen la deforestación y la contaminación del agua y han emanado de esta reflexión, leyes y normas que impiden la tala de bosques y hemos determinado normas para el tratamiento de aguas residuales y devolver al ambiente el agua casi con la misma calidad con que la tomamos. Pero, vemos que se siguen talando bosques y contaminando el agua, y la pregunta aquí es ¿Por qué?

Las políticas ambientales hasta hoy promovidas acotan el daño y consecuencias al ambiente, pero NO restringen o se enfocan en identificar y frenar las ACTITUDES del ser humano que siguen ocasionando daños ambientales, como si el ser humano no formara parte de él y más aún sufra consecuencias por su daño.

Pienso que ya es tiempo que la política ambiental deje solo de enfocarse al ambiente y trate, con el apoyo de especialistas en Ciencias del Comportamiento Humano (Psicólogos, Sociólogos, Antropólogos), de influir en los hábitos y costumbres del ciudadano para que, así como limpiamos y conservamos nuestras casas también conservemos nuestras ciudades y nuestro entorno natural. . Finalmente, creo que está en un apartado del razonamiento psicológico del ser humano poder verdaderamente detener el deterioro de nuestro ambiente.

La problemática ambiental que enfrentamos hoy quizá es parte consecuencia de una mala concepción de sus causas de origen, y que nos ha llevado a poner al frente de las políticas y normatividades ambientales a profesionistas de las ciencias naturales que hoy necesitan apoyo urgente de otro grupo de especialistas.

Sin duda, los profesionales en ciencias naturales como los Biólogos, Ecólogos e incluso Geógrafos han contribuido ampliamente en la evaluación y dimensionamiento de las consecuencias del deterioro ambiental que hemos causado principalmente los seres humanos; pero los enfoques para dar solución a la causa raíz de las problemáticas ambientales han quedado fuera de sus capacidades perspectivas: esto habla mucho de la CONDUCTA DEL SER HUMANO.

Hemos entendido casi a la perfección, por ejemplo, el Ciclo hidrológico y las consecuencias que tienen la deforestación y la contaminación del agua y han emanado de esta reflexión, leyes y normas que impiden la tala de bosques y hemos determinado normas para el tratamiento de aguas residuales y devolver al ambiente el agua casi con la misma calidad con que la tomamos. Pero, vemos que se siguen talando bosques y contaminando el agua, y la pregunta aquí es ¿Por qué?

Las políticas ambientales hasta hoy promovidas acotan el daño y consecuencias al ambiente, pero NO restringen o se enfocan en identificar y frenar las ACTITUDES del ser humano que siguen ocasionando daños ambientales, como si el ser humano no formara parte de él y más aún sufra consecuencias por su daño.

Pienso que ya es tiempo que la política ambiental deje solo de enfocarse al ambiente y trate, con el apoyo de especialistas en Ciencias del Comportamiento Humano (Psicólogos, Sociólogos, Antropólogos), de influir en los hábitos y costumbres del ciudadano para que, así como limpiamos y conservamos nuestras casas también conservemos nuestras ciudades y nuestro entorno natural. . Finalmente, creo que está en un apartado del razonamiento psicológico del ser humano poder verdaderamente detener el deterioro de nuestro ambiente.