Es complejo descifrar los escenarios de inundaciones en zonas urbanas en los tiempos actuales, cuando los efectos de los Cambios Climáticos Globales (CCG) los hacen, en apariencia, extremos y catastróficos.
Resulta que de repente se inunda donde antes no se daba y/o los niveles de inundación sobrepasan los registros históricos con que se cuentan y creo que hemos abusado de sus orígenes vinculándolos al Cambio Climático Global. Pienso, además que estamos pasando por alto una irresponsabilidad que se ha venido dando en el manejo y criterios para el diseño de obras hidráulicas para el control de aguas pluviales y sus inundaciones consecuentes, y sobre todo el respeto y apego a los planes de desarrollo urbano.
Cuando se cuenta con obras hidráulicas para el control de inundaciones urbanas (en el mejor de los casos), han sido sobrepasadas en su operatividad por las lluvias extremas y en el caso crítico que no se cuente con ellas, las consecuencias de inundaciones han sido severas. En el primer caso, esto se da principalmente porque los períodos de retorno con los que se han diseñado drenes pluviales, y en general la infraestructura hidráulica de una ciudad, han sido minimizados principalmente por una política económica y ahorro mal entendido que ha hecho que estas fallen ante lluvias extremas, que quizás no necesariamente están asociadas sólo a escenarios de Cambios Climáticos Globales que enfrentamos.
Otro aspecto importantes ha sido que la falta de una Planeación del Desarrollo Urbano Integral (incluyendo principalmente asentamientos humanos irregulares), que considere, entre otros muchos aspectos, la hidrología y patrones de escurrimiento; esto ha generado la saturación de cuencas urbanas, se han invadido y/u obstruido vías de escurrimiento y llevando al mínimo la capacidad de infiltración del suelo, por el alto porcentaje de pavimentación urbana; bajo este contexto, las inundaciones son más que explicables por estas causas que por los efectos de los Cambios Climáticos Globales que invocamos. Esto hace que enfoquemos mal nuestras estrategias de soluciones, ya que muchos recomiendan estudiar y conocer a fondo la dinámica del Cambio Climático Global antes de diseñar o rediseñar adecuadamente las obras hidráulicas para el control de inundaciones y destinado recursos para este tipo de estudios; cuando es quizás más importante y prioritario, que por ejemplo, exigir que se cumpla con las normas de diseño que estipulan utilizar períodos de retornos de al menos 50 años para garantizar su eficiente trabajo, conociendo o no los efectos de los Cambios Climáticos Globales.
En temporalidad y origen, digamos que los CCG están asociados al proceso de industrialización en el desarrollo de la sociedad. El origen y nacimiento de la Revolución Industrial data de mediados del siglo XVIII y nace en el continente europeo, particularmente en Gran Bretaña. Si fijáramos esta referencia temporal, los CCG son efectos acumulados con un período de desarrollo de al menos 150 años; en un estricto sentido práctico y sin gastar muchos recursos en entender los orígenes y consecuencias de los CCG, no sería necesario considerar sus efectos para el caso y diseño de obras hidráulicas para el control de inundaciones.
Bajo este contexto y por el desacato en una buena planificación del desarrollo urbano y obras de control de inundaciones, creo en la urgente necesidad de diseñar y construir drenes pluviales en la gran mayoría de nuestras ciudades apegados, al menos, a la normatividad vigente dejando por el momento los escenarios de los CCG, para así resolver la problemática de las inundaciones que sufren la mayor parte de las zonas urbanas en el país y alrededor del mundo.